Acaba la noche en un rincón apartado
de alguna de parte de ningún sitio,
donde no existen sonidos, solo el aire,
de los susurros del alrededor,
el agua que cae por una pequeña ladera,
acompañando mis tardes, mis noches, las mañanas.
Déjame susurrarte algo al oído,
inolvidable y atrevido.
Obvio es el momento del olvido,
ese olvido por la lucha del querer y no ser!
Tan grande se vuelve el espacio,
cuando nos distanciamos…..
cuando nos distanciamos…..
Tan difícil de llevar ese momento de distancia,
cuando a un solo paso está la vía del amor,
solo a un paso la del desamor.
Máscara que envuelve el sentido
enlazando la vida, ocultando la mirada
para no entrañarla, sujeta a ella ampara
la triste escena camuflada,
en el torso de su mejilla.
Sosegada, pienso, piensa,
en este segundo leyendo estas letras
que yo estaré pensando en ti cuando las leas...
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