Lanzando la imaginación,
mesa concurrida de profesionales,
cita
incalculable a la decisión de largas catas,
soñando con los aromas,
deleitarse trago a trago.
Sombras entre letras,
Sombras entre letras,
meticulosas facetas, historias...
Senderos recorridos en una ladera.
Lápices tomando notas,
Lápices tomando notas,
énfasis en voz alta, glaciar en nariz y boca...
Maderas, café recién tostado,
Maderas, café recién tostado,
frutos secos encapuchados,
óxido del mareo
suntuoso,
goloso, tentador, elegante, variedad....
UMMMMMM delirio al
catar.
Sube la adrenalina poco a poco,
Sube la adrenalina poco a poco,
acalorada escena,
de impetuosas emociones,
las voces, las notas, en fin la noche!!!
No es lo que parece,
No es lo que parece,
suben y bajan las burbujas,
envolviéndose en los
labios,
impregnándolos de la esencia,
recorren el paladar para
quedarse,
sin ser anónimo, me derrite....
Imagino la velada
Imagino la velada
acompañada de esas burbujas elegantes,
que se desvanecen,
café tostado, elegante y glorioso.
Risas sorteando una gran velada,
Risas sorteando una gran velada,
momentos sin calcular,
potenciado a la inspiración de dejarse llevar.
Una copa, una cata, la vida... sin pensarlo.
Una copa, una cata, la vida... sin pensarlo.
Por todo aquello qu rodea el buen vino, por una cultura de siglos que adornas con letras de oro, por conocer el secreto de esta sangrante bebida, por hacer que fermenten las palabras hasta llegar al corazón, por ver la botella medio llena, por controlar la luz y la temperatura para obtener el color y sabor apropiado, por dejarnos paladear tus sentimientos amerados en el “tartaro” de tantas emociones acumuladas. Levanto mi copa de vino a tu salud, en este caso, como sabes, de Jumilla.: Chin…. Chin…..
ResponderEliminarGracias, jumilla, buen vino y buena historia, siempre hay unas letras para todos los momentos que vivo.
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